Joan Manuel Gisbert nació en Barcelona el 1949 y estudió Ingeniería, aunque pronto se dio cuenta de que sus gustos se decantaban más hacia lo artístico. Trabajó en el mundo del teatro y más tarde estuvo relacionado con la actividad editorial, lo cual lo impulsó hacia su verdadera vocación de escritor. Ha sido galardonado con numerosos premios y reconocimientos por muchas de sus obras, la mayoría de ellas marcadas por la fantasía y los mundos imaginarios.
En El mago de Esmirna, 1987, el autor nos presenta a un joven llamado Shaban, hijo de un mago, que deberá emprender un largo viaje en solitario para descubrir ciertas cosas por sí mismo y llegar a ser así un mago tan reconocido como su padre, el Mago de Esmirna. Aunque su padre lo guía, Shaban debe llegar solo a su destino, la Gran Montaña, un lugar enigmático, lleno de secretos y sorpresas. Una vez allí el joven será puesto a prueba y sus acciones determinarán cuál va a ser su futuro, si consigue o no ser mago. En estas pruebas incluso consigue ver episodios que forman parte de su propia vida en el futuro, como por ejemplo el rescate de Rudaima, una joven que emprende el mismo viaje y a la que conoce de camino a la Gran Montaña.
La Gran Montaña es una, pero diferente para cada visitante. Cada viajero tiene un camino propio para llegar hasta ella y, a su llegada, lo que encuentren cada uno de ellos será totalmente diferente del resto de viajeros. Es decir, hay una montaña diferente para cada uno de sus visitantes. Allí se pueden ver espacios tan diferentes como desiertos, ciudades, mares, bosques…
Además del gran imaginario que encontramos en la obra y de su riqueza léxica y descriptiva, también hallamos referencias geográficas reales, aunque algunas de ellas ya no las conozcamos con esa denominación. Algunas son Esmirna, el río Eúfrates, Lusitania, Alejandría, Normandía, Arabia…
En definitiva El mago de Esmirna es una obra que, a pesar de tener más de veinte años, puede seguir siendo muy recomendable para los lectores de LIJ tanto por su temática como por su estilo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario