Jacinto Benavente (Madrid, 12 de agosto de 1886 – Madrid, 14 de julio de 1954) fue el hijo menor de un reconocido pediatra, quizás éste es motivo por el que ha mostrado gran sensibilidad a la hora de dirigirse a un público infantil. Autor de un sinfín de títulos fue en 1910 cuando escribió El príncipe que todo lo aprendió en los libros. Se trata de una comedia de teatro infantil compuesta por 79 páginas todas ellas portadoras de una lectura fácil y entretenida.
El príncipe que todo lo aprendió en los libros es una obra que cuenta cómo El Príncipe Azul, heredero al trono recibe la noticia de que debe emprender la marcha hacia lugares desconocidos para que se enfrente por primera vez al mundo real y se convierta en un gran rey. Viajará acompañado por El Preceptor, personaje que piensa que todo lo que hay que saber está en los libros, además de la compañía de Tonino, quien es muy práctico y algo irónico. Dentro de la obra se observan todos los tópicos que existen en los cuentos tradicionales, El Príncipe, El Ogro, La Bella y las Tres Princesas, entre otros. De esta manera, El Príncipe Azul que ha leído multitud de cuentos comparará todo lo que le sucede con las historias que se sabe de memoria, cosa que le hará creer en fantasías y no perder la ilusión hasta encontrar a La Princesa que siempre había imaginado.
Considero la obra El príncipe que todo lo aprendió en los cuentos un libro acertado para un público infantil, ya que aporta valores de lucha y optimismo hacia los problemas que puedan aparecer en la vida. Su estructura y vocabulario sencillos pueden potenciar el interés de un lector joven que se inicie en el apasionante mundo de la literatura y que decida emprender ese camino con un título teatral como éste.
El príncipe que todo lo aprendió en los libros es una obra que cuenta cómo El Príncipe Azul, heredero al trono recibe la noticia de que debe emprender la marcha hacia lugares desconocidos para que se enfrente por primera vez al mundo real y se convierta en un gran rey. Viajará acompañado por El Preceptor, personaje que piensa que todo lo que hay que saber está en los libros, además de la compañía de Tonino, quien es muy práctico y algo irónico. Dentro de la obra se observan todos los tópicos que existen en los cuentos tradicionales, El Príncipe, El Ogro, La Bella y las Tres Princesas, entre otros. De esta manera, El Príncipe Azul que ha leído multitud de cuentos comparará todo lo que le sucede con las historias que se sabe de memoria, cosa que le hará creer en fantasías y no perder la ilusión hasta encontrar a La Princesa que siempre había imaginado.
Considero la obra El príncipe que todo lo aprendió en los cuentos un libro acertado para un público infantil, ya que aporta valores de lucha y optimismo hacia los problemas que puedan aparecer en la vida. Su estructura y vocabulario sencillos pueden potenciar el interés de un lector joven que se inicie en el apasionante mundo de la literatura y que decida emprender ese camino con un título teatral como éste.
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