Telmo Yáñez es un joven muchacho que vive en Navarra y que un día parte hacia Bretaña. Allí Telmo que es artesano va a participar en la construcción de la catedral de Kerloc'h, financiada por la Orden del Águila de San Juan. Pero la construcción de esa extraña y grandiosa catedral encierra terribles crímenes. Telmo en Bretaña no sólo realizará una de las mejores esculturas de su carrera, sino que se enfrentará a personas terribles y allí vivirá muchas aventuras que no olvidará jamás.
Esta obra está escrita de una manera muy sencilla y por tanto, es muy fácil de leer, a pesar de que tiene léxico propio del campo semántico de la arquitectura, lo cual no supone un obstáculo para la comprensión de la obra.
Se trata de una obra de aventuras, en la que el protagonista tiene 14 años, por tanto, lo niños se sienten identificados con él. Este protagonista vive una serie de aventuras y en la mayoría de ellas su vida corre peligro. Todo empieza cuando parte de Navarra con tres bárbaros que para los niños pueden ser como tres monstruos y con ellos vive una serie de situaciones violentas y agresivas hasta que consiguen llegar a Bretaña. Un ejemplo claro de lo que se está diciendo es cuando se pelean Folco y Loki en una taberna. Es más, las escenas se describen con mucha violencia y toda la obra está llena de acción y violencia. Esto, indudablemente, es algo que a los jóvenes les llama la atención y les gusta, más a los chicos que a las chicas pero es algo que hace atractiva esta obra.
En esta obra hay otro ingrediente que da vida a la narración y del mismo modo la hace también atractiva para los jóvenes y, no es otra cosa, que el misterio. La obra está llena de misterio porque no se sabe muy bien lo que pasa hasta casi el final de la obra y siempre hay alguna sorpresa. Del mismo modo hay desapariciones e historias que no se terminan de contar precisamente para captar la atención del lector. En algunos capítulos, por ejemplo, el capitulo 9, el autor avanza lo que va a ocurrir para enganchar al lector.
Esta obra también tiene un toque de humor que hace que la obra sea más amena y divertida. Esto también ayuda a que los jóvenes se interesen. Por ejemplo, el protagonista no se cree que la tierra sea redonda porque en aquella época es algo que todavía no se ha demostrado, pero los niños que lean la obra si saben que es cierto y esto puede resultar gracioso para ellos.
A pesar de que no se trata de una obra de amor, hay varias escenas cuyos protagonistas son Telmo y la hija del hombre que cuida de él en Bretaña. Los niños pueden sentirse identificados en estas escenas, puesto que la niña toma la iniciativa y se le insinúa a Telmo y le dice que se van a casar. Esto es algo que puede suceder en la realidad porque las niñas son más despiertas para estas cosas que los niños en estas edades.
En cuanto a la estructura de La catedral está dividida en capítulos bastante cortos, por lo que su lectura se hace más fácil y amena.
El tema principal de la obra es un tema que siempre estará de actualidad. En aquella época era un tema actual y ahora, quizá de otra manera, pero lo sigue siendo. El tema es el bien y el mal, el cielo y el infierno, Dios y el diablo. Un tema que puede ser un tanto controvertido y quizá, en un principio, poco interesante para unos niños de 14 años pero el autor construye la obra de manera que este tema resulta muy llamativo para los niños, porque el autor lo plantea con misterio, con descripciones violenta y con aventuras.
Una última cosa que ayuda a que el joven lector se interese por la obra es que el protagonista es un joven de 14 años que madura a lo largo de la obra y que se convierte en el héroe de la propia historia. Todo el mundo confía en él, este protagonista tiene una gran responsabilidad en la obra, tiene que salvar la vida de todo el mundo y así lo hace. Por tanto, el lector puede sentirse identificado, no sólo por la edad como hemos dicho anteriormente, sino porque en esas edades quieres ser protagonista de todo y aquí indudablemente lo es.
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